La radiofrecuencia facial es una técnica de medicina estética diseñada para tratar la flacidez de la piel, produciendo un efecto tipo lifting pero sin necesidad de cirugía. Es adecuado para pacientes con flacidez leve o moderada del tejido facial.

Se usa comúnmente para tratar la frente (levantar las cejas y tensar la piel de la frente), debajo de los ojos (engrosa la piel y tensa y levanta la piel de la parte superior de las mejillas), mejillas (reduce los poros dilatados), línea de la mandíbula (reduce flacidez) y cuello (la piel se tensa y reduce las arrugas).

¿Para quién está hecha?

Esta tecnología está dirigida a todos los hombres y mujeres que desean mejorar la apariencia de su piel, lograr una apariencia más joven y firme y tratar la grasa que favorece la aparición de acné. Es un procedimiento no invasivo e indoloro que no requiere intervención quirúrgica y, por lo tanto, se recomienda para cualquier persona que quiera evitar otros procedimientos más invasivos.

¿Cómo funciona esta técnica?

Antes de la terapia de radiofrecuencia, el médico debe examinar el estado general del paciente y asegurarse de que no exista ningún problema que pueda impedir su uso. Por ello, es muy importante acudir a una clínica médico-estética y no utilizar este procedimiento sin la debida supervisión.

Para realizar un tratamiento de radiofrecuencia en el rostro, la piel debe estar limpia (evitar el uso de maquillaje). En la zona tratada se aplica un gel conductor de ondas electromagnéticas y se masajea la zona con un aparato de radiofrecuencia. El profesional elige el programa o nivel a utilizar en función de la zona a tratar. También se puede utilizar en combinación con otros tratamientos para mejorar los resultados.

El uso de corriente alterna en el rostro eleva la temperatura de los tejidos más profundos de la piel, lo que favorece la estimulación de las células encargadas de la producción de colágeno. Así se forman nuevas fibras de colágeno, que se debilitan con el tiempo, y la piel recupera su fuerza y ​​elasticidad.

Cuando finaliza la sesión, el paciente puede irse a casa. No es necesario utilizar anestesia para este tratamiento. No tiene efectos secundarios, aunque puede haber un ligero enrojecimiento en la zona tratada, que desaparece inmediatamente.

Para conseguir los resultados deseados es necesario realizar más de un tratamiento, su número depende del tipo de piel, edad y zona tratada. Pero a partir de la segunda sesión puede que empieces a notar resultados que serán más evidentes al cabo de un mes. Cada sesión puede durar entre 30 y 45 minutos.

¿Qué beneficios aporta?

La radiofrecuencia facial es una técnica de medicina estética destinada a rejuvenecer el aspecto del rostro y el cuello. Es un método no invasivo y nada agresivo con la piel, por lo que tiene muy pocos efectos secundarios, a parte del mencionado anteriormente. Es una técnica que no duele ni causa molestias al paciente durante ni después de su administración.

· El tratamiento de radiofrecuencia facial ofrece muchos beneficios:

· Mejora la forma ovalada de la cara.

· Reduce la flacidez de rostro y cuello, provoca la contracción de la piel, efecto reafirmante.

· Ayuda a eliminar las arrugas finas y las líneas faciales.

· Reduce la producción de sebo eliminando las espinillas del acné.